Liceth Quiñones, una joven afro que recibió de su madre, Rosmilda, el saber asociado a la partería y la relevó como líder del principal grupo de parteras de la Región Pacífica colombiana, es quien guía este recorrido. La observamos en la intimidad del hogar y la familia preparando a su hijo, Miguel Ángel, como joven partero y asegurando así la transmisión generacional del conocimiento; la acompañamos en Buenaventura liderando Asoparupa y atendiendo diferentes etapas del embarazo en la expresión más genuina del oficio de partera; y somos testigos de cómo Liceth reivindica frente a diferentes instituciones, colombianas e internacionales, que las parteras sean reconocidas como médicas tradicionales. Sus manos de luz son manos que dan vida.